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Nueva salida del Riachuelo

Después de 220 años recién caeremos en la cuenta de que con la actual salida, el Riachuelo se ganó un tapón hidrodinámico de 3 Km.

Esta nueva salida, activa las 24 horas del día, debería permitir algo más que decuplicar sus flujos, hoy prácticamente inexistentes.

La sedimentación en su curso es tan bruta, como que pierde ocho (8) cms. de profundidad por año. ¡¿Por qué no empiezan a resolver los flujos?!

restauracion de la curva originaria de salida del Riachuelo rumbo a las área donde el efecto Alflora resolvera sus salidas de flujos las 24 horas del dia

Las observaciones de cualquiera de las salidas de tributarios al estuario, otras que no sean las del frente deltario, muestran con total claridad cómo las convecciones internas dentro de los cordones litorales acompañan los flujos advectivos mareales, suscitando sus salidas.

Y en la capa límite térmica que los separa, allí sedimentan eso que dan en llamar "depósito cuspidado"

El "catecismo" de los expertos en dinámica costera que siempre referenció estas salidas al oleaje oblicuo que les explica la famosa "deriva litoral", nunca les permitió incorporar aprecios termodinámicos a estas cuestiones.

No los necesitaban, pues para ellos, con el viejo catecismo de la mecánica de fluidos ya su cosmovisión estaba conformada.

La diferencia entre un río y una ría son las energías de las mareas involucradas en la segunda. Pero la diferencia entre una ría y un estuario son las temperaturas involucradas en este último; y en particular, en la muy pobre profundidad en las inmediaciones de sus riberas donde se gestan los cordones.

Es así que cabe recordar de la voz “estuario”, su raíz indoeuropea aidh- que apunta a lo que se quema, a lo que se calienta. De aquí: estío.

El documento sobre Hidrotermias recién editado, nos regala anticipo de los efectos que estas causan en la boca de los tributarios, estimulando sus salidas por convección interna dentro del estrecho corredor de los cordones litorales; hasta alcanzar el gradiente térmico que encienda el proceso convectivo externo que transfiera sus energías a los flujos en bajante.

Los devotos herederos del concepto de "deriva litoral" todavía no han recalado en estas hidrotermias y en sus convecciones internas. Nuestros modeladores matemáticos tampoco. Sus modelos matemáticos wasp5 e hidrobid2 nunca las vieron.

Un enfoque termodinámico me descubre más coincidencias con estas imágenes, que las que pretenden justificarse con la teoría del oleaje oblicuo sostenedora de la deriva litoral.

A estas imágenes conceptuales las siento precisamente al revés. Es desde esa transferencia de energía que llamamos "calor", que se gesta la convección interna de salida del tributario; que se gesta el cordón litoral, que se gesta la deriva litoral; que se gesta el oleaje oblicuo; y hasta la convección atmósférica que se suscita en estas áreas ribereñas.

Ver estos oportunos comentarios del Dr. José Luis Cavallotto al final de su trabajo: Evolución y cambios ambientales de la llanura costera de la cabecera del río de la Plata. Revista de Asociación Geológica Argentina N° 60 (2005).

"Acompañando el descenso del nivel del mar, los valles de los arroyos Arrecifes, Areco, de la Cruz y del río Luján comenzaron a rellenarse, los depósitos aquí desarrollados contienen restos de Erodona macroides y Tagelus plebeius.

La presencia predominante de Erodona macroides en la composición de los cordones que conforman la llanura con cordones de playa y en los despósitos que rellenan los paleovalles antes mencionados, revela que durante la sedimentación de los mismos las aguas fueron cálidas, lo cual indica que las temperaturas de las aguas estaban por encima de los valores actuales.

Si a los valores actuales, estas hidrotermias y sus transferencias convectivas internas dentro de los bastardeados cordones litorales, son bien visibles en nuestras imágenes satelitales; qué formidable energía habrán transferido en aquellos tiempos dejando grabados por milenios, haciendo acreencias en las riberas, estos cordones litorales que todavía insisten en atribuir a un oleaje oblicuo y a una "deriva litoral" por él determinado; a la que no dedican mayores atenciones, otras que respondan a catecismos.

Pitágoras no empezó con un teorema. Pitágoras empezó dándose cuenta. Fenómeno eurístico más simple que un vaso de agua para el que le toca en suerte. De imposible acceso al que no le toca, a menos que alguien le ayude a verlo, con un teorema o con cuatro teoremas. No es sólo uno el acceso.

Varias imágenes de salidas de tributarios al estuario en la costa uruguaya y argentina, nos revelan este presente que he dado en llamar Efecto Alflora.

rio San Francisco en la costa uruguaya

Típico ejemplo de salida al estuario a contrapelo de los flujos en descenso, favorecidos por transferencias convectivas potenciando internamente los flujos de salida. Así salía nuestro Riachuelo antes de Mayo de 1786.

Rio San Juan R.O.U.

Típico ejemplo de salida al estuario a contrapelo de los flujos en descenso, favorecidos por transferencias convectivas potenciando internamente los flujos de salida. Así salía nuestro Riachuelo antes de Mayo de 1786.

Rio Santa Lucia R.O.U.

 

Nadie se preguntó qué hacía la vuelta de Rocha en ese lugar. Ni cuándo se había generado. Alguien me comentó que había escuchado que era huella de un antiguo cordón. Pues cabe comentar que ningún cordón deja ese tipo de huellas.

Nadie se preguntó por qué se había abierto una nueva salida en el Riachuelo.

Nadie se preguntó qué hacen los demás tributarios saliendo en dirección aparentemente contraria a lo que imaginaríamos debido enlace de un río o arroyo tributario con su hermano mayor.

¿El oleaje oblicuo del Sudeste en ambas riberas? Excluyente generalización, reitero, de los conceptos desprendidos de la "deriva litoral" a la que nunca le dedican demasiado tiempo en precisar su dirección y explicar sus motivos y función. Prisioneros de conceptos que los tienen como ciegos tallando con herramientas inservibles.

Me gustaría saber qué modelador tiene el modelo ajustado para precisar estas novedades de las convecciones internas fluyendo por estrechos cordones, conocidas hace 10.000 años

¡¿Cómo es posible que no incursionen en imágenes satelitales que traduzcan el espectro con filtros de infrarojos?!

Suscribo este regalo de mi Musa, ahorrándome el trabajo de poner en duda lo que a todas luces, por fin me sabe natural.

Se han gastado 90 millones en consultorías y pagado casi 20 en multas sin aun haber alcanzado a despertar del Riachuelo, sus flujos; y sin mención alguna a los problemas de su salida.

Balance que revela ausencia de Musas reveladoras, otras que musas de consultoras, mercaderes de suelos y financieras.

de las vacas R.O.U.

Típico ejemplo de salida al estuario a contrapelo de los flujos en descenso, favorecidos por transferencias convectivas potenciando internamente los flujos de salida. Así salía nuestro Riachuelo antes de Mayo de 1786.

Reitero: hay creación crítica que deviene de reflexión. Y hay creación eurística que deviene de tener el alma abierta como la de un niño. Que incluso, encuentra, sin necesidad de buscar.

El Efecto Alflora especula con una devolución de la dirección de salida original y una larga cuña de ajuste del gradiente térmico que permita alcanzar el despegue de la convección externa.

.Típico ejemplo de salida al estuario a contrapelo de los flujos en descenso, favorecidos por transferencias convectivas potenciando los flujos de salida. Así salía nuestro Riachuelo antes de Mayo de 1786.

Esta Ensenada de Barragán ha sido sustancialmente afectada por obranzas humanas. Sin embargo, el río Santiago da claras muestras hacia dónde apuntaba su salida

hidrotermias succionadas por las tomas de Palermo

Quien haya visto la antepenúltima página mi documento sobre “hidrotermias” advertirá qué lejos están nuestras modelaciones matemáticas, o los conceptos derivados de la "deriva litoral", de explicar los esperpentos que muestra el satélite en inmediaciones de las tomas de agua de Palermo.

Convecciones aquí externas, las conducen hacia ellas luego de recorrer 14 Km. y a pesar de que el viento del NE y la marea en bajante deberían haberles impedido sus ascensos.

La original sedimentación alrededor de estos pequeños muelles, indica con claridad cómo opera la convección interna en esas estrechas franjas costaneras, aun viendo bastardeados sus cordones litorales.

Típico ejemplo de salida al estuario a contrapelo de los flujos en descenso, favorecidos por transferencias convectivas potenciando internamente los flujos de salida. Así salía nuestro Riachuelo antes de Mayo de 1786.

No he encontrado lugar donde se haga uso de esta palabra “hidrotermia”;

que de sobra cabe para poner nombre a la energía que ha quedado desbordada fuera de sus cordones de contención donde cumplían perfectamente su función.

Si a lo que vemos tan fuera de lugar no le ponemos nombre, ¿cómo lo señalaríamos?

Agradezco este presente eurístico, que en reconocimiento he dado en llamar: Efecto Alflora

Esta propuesta es más antigua que mis ancestros. De original, en el sentido de lo novedoso, no tiene nada.

Los cordones litorales no son una novedad. La novedad es ver a esas energías en ausencia de ellos, boyando sin límites, ni funciones previsibles, otras que no fueran los fastidios de Natura.

Francisco Javier de Amorrortu
16/10/06

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